El Covid-19 ha provocado temor e inseguridad entre los inversores, el desplome de los mercados con las peores cifras de las últimas décadas a nivel mundial; la preocupación crece aceleradamente y al igual que en otras ocasiones de crisis se busca una salida, un valor refugio o valor defensivo y no es otro que aquel de bajo riesgo y rentable en el largo plazo y que tiene la mayor probabilidad de mantener sus beneficios e incluso incrementarlos.